martes, 27 de noviembre de 2012

Una Parroquia de Cine: Ciclo de Bioética - Bella

Ciclo de Bioética : Bella

El próximo viernes 30 de noviembre a las 21:00h cerraremos el ciclo de Bioética con "Bella", primera película del director mexicano Alejandro Monteverde, y que obtuvo el reconocimiento del Festival Internacional de Cine de Toronto, con el premio que otorga el público. 
Es la historia de José y de Nina, de sus cruces personales que cargan en silencio, una relato complejo contado con sencillez que se convierte en un canto a la vida en medio de la desesperanza que los envuelve.


domingo, 18 de noviembre de 2012

Para la Reflexión "Teología y Antropología de la Vida Naciente"

Teología y antropología de la vida naciente

La Visitación de Giulio Romano y Giovanni Francesco Penni (diseñado por Rafael) (1517) Museo del Prado. Mas información en la Galeria online del Museo Galeria Online   

La vida del creyente no es una vida irracional. El ciudadano religioso reclama en el espacio público el mismo derecho a la razón que asiste al ciudadano secular. Si el ciudadano secular recurre a su cosmovisión para hacerse presente en el espacio público, ¿por qué se le exige al ciudadano religioso la privatización de su cosmovisión? Un Estado realmente democrático protege por igual la razón secular como la razón religiosa. Sin entrar ahora en la cuestión acerca de que la historia de la razón es imposible sin tener en cuenta la aportación de las tradiciones religiosas, especialmente la cristiana en el mundo occidental. Por ello hemos unido en el título teología y antropología para aportar elementos de reflexión a los problemas en torno a la vida naciente.

Yendo de hoy hacia atrás, la más elemental antropología de la vida cotidiana nos descubre, en este tema de la vida naciente, que una joven madre, certificada su fecundación, corre veloz a casa de su madre y le dice: “¡Mamá, estoy embarazada, esperamos un hijo!”. Sería ridículo hablarle a su madre de “conglomerado de células”.

Esta antropología de lo cotidiano, para el creyente arranca de la antropología bíblica que no deja de ser también una antropología de lo cotidiano. Fe e irracionalidad se compadecen muy mal. El creyente cristiano cabal está lejos de los fundamentalismos. Es el mismo Dios el autor de la fe y de la razón y, por tanto, no puede contradecirse. Hagamos un rastreo, a lo boy scout y a lo científico, en la Biblia para arrojar luz sobre la vida naciente.

El relato de la visita de María a Isabel (Lc 1, 39-48) está marcado por un símbolo delicado y fundamental. El niño “saltó de alegría en el vientre” de Isabel. Esta última, dirigiéndose a María, le dice con una bendición: “¡Bendito el fruto de tu vientre!”. El vientre es un símbolo delicado y fundamental, no sólo porque es imagen de ternura y fecundidad sino también porque es el signo de la vida.

En él tiene sus raíces la vida física de la criatura y en el seno de la madre la Biblia pone en acción al mismo Creador, como canta en una bella estrofa el Salmo 138:

“Tú has creado mis entrañas, me has tejido en el seno materno. Te doy gracias porque me has escogido portentosamente, porque son admirables tus obras, conocías hasta el fondo de mi alma, no desconocías mis huesos. Cuando en lo oculto, me iba formando, y entretejiendo en lo profundo de la tierra, tus ojos veían mis acciones, se escribían todas en tu libro, calculados estaban mis días antes que llegase el primero.”

Las palabras del salmista nos permiten comprender otro valor del símbolo “seno/vientre”: él no es sólo la raíz del hilo de la vida; es también la raíz de la vocación divina de todo hombre y mujer, es decir, de su misión en la historia. Conocemos la declaración que el Señor hará al joven Jeremías el día de su llamada (1,5):

“Antes de formarte en el vientre, te escogí, antes que salieras del seno materno, te consagré”.

Lo mismo sucederá con el Bautista “lleno del Espíritu Santo ya en el vientre de su madre” (Lucas 1,15), y con Pablo, convencido de haber sido “elegido desde el vientre de su madre” (Gálatas 1,15).

Teniendo detrás esta tradición volcada en el amor a la vida naciente, el creyente no puede menos que proponer al varón y a la hembra de hoy ese amor al hilo inicial de la vida humana. La ciencia médica lucha por la vida y la apoyamos y la necesitamos. Ayuda a la maternidad pero no la sustituye. Antes del día primero, desde lo oculto de la fecundación, ya Alguien nos conoce y nos espera. Pura humanidad.

Blas Silvestre, Noviembre 2012

jueves, 1 de noviembre de 2012

Ciclo de Conferencias sobre Bioética

Parroquia San Antonio de Padua
Programa - Conferencias sobre Bioética
         
“Vamos a aprender a cambiar el hombre antes de saber qué es el hombre. Lo esencial del hombre es más frágil de lo que cree". Jean Rostand
       
Lugar: Salón de Actos de la Parroquia
Hora:  20 horas
Inscripción: En la misma Parroquia
Matrícula: 5 euros
       

Presentación:

La virtud de la prudencia es la virtud que debe regir todo el actuar humano. La prudencia es, en cierto sentido, la síntesis de todas las virtudes: es el buen juicio, el arte de la medida y de la oportunidad en el obrar. Prudencia implica valor, templanza, justicia y sabiduría práctica. Y el significado de tal concepto no afecta exclusivamente a la ética. La antropología, la concepción del mundo y la sociedad, el por qué de las cosas tienen mucho que ver con la prudencia. Ésta, la virtud de la prudencia, pone de manifiesto la contingencia, la precariedad y la imprevisibilidad de la acción humana. Los hombres no son dioses ni su saber es absoluto. De ahí que deban medir su comportamiento enfrentándose a lo imprevisible y aceptar el riesgo de equivocarse. La prudencia nos sitúa ante los límites de la razón, que no ignora los aspectos más trágicos de la existencia humana, pero confía en el poder del conocimiento y de la acción para superarlos. La prudencia es la primera y la última palabra de un actuar humano que nos invita a querer todo lo posible, pero solamente lo posible, y a dejar el resto en las manos de Dios.

Esta concepción de la prudencia, que aprendimos en la filosofía griega, quiere enmarcar el ciclo de conferencias sobre bioética, una disciplina del actuar humano que ha puesto en manos de los científicos y los médicos enormes posibilidades de actuación, que deben ser utilizadas con prudencia salvaguardando siempre la primacía y la dignidad del ser humano como persona.


CICLO CINE Y BIOÉTICA
La exposición de los profesores tendrá una duración de 45´ a la que seguirá un diálogo de 30´

  •  Miércoles 7 de noviembre.

Historia y fundamentos de la Bioética


Juan Carlos Siurana, Profesor Titular de Filosofía Moral, en el 
Departamento de Filosofía del Derecho, Moral y Política de la 
Universitat de València. Director del Grupo de Investigación en Bioética 
de la Universitat de València.


  • Miércoles 14 de noviembre.

Problemas éticos en el inicio de la vida.


María Amparo Muñoz, Profesora Asociada del Departamento de Filosofía del Derecho, Moral y Política de la Universidad de Valencia y Catedrática de Filosofía de Educación Secundaria.

  • Miércoles 21 de noviembre.

Células madre y clonación


Javier García Conde, Catedrático de Medicina, Máster en Bioética, Hospital Clínico Universitario, Valencia.

  • Miércoles 28 de noviembre.

Buscando un sentido al final del viaje.


José Luís Guinot, Jefe clínico de Oncología Radioterápica del IVO, Coordinador de la Asociación Humanidad Nueva y vicepresidente de la Asociación Viktor Frankl.

       
“El futuro del hombre dependerá no tanto de su ciencia cuanto de su sabiduría”. Juan Pablo II